19 septiembre 2010
Nuestra región crece impulsada por su nueva inserción internacional - por Jorge Castro - Clarín, B.A.
Clarín, por Jorge Castro, 19/09/2010, extracto.-
América latina crece este año 5.5% / 6%, o más, encabezada por Brasil, que se expande 7.6% / 8%, tras haber aumentado 8.9% en los primeros seis meses. Se supera así el récord establecido durante el boom 2003 / 2008, en que creció 5.2%, con inflación menor a un dígito. Lo notable del auge de 2010 es que todos los países de América del Sur tienen la misma estructura de comercio exterior, con más de la mitad de sus exportaciones constituidas por materias primas (soja, cobre, mineral de hierro): Brasil, 56%; Chile, Colombia, Perú 70% / 80%.
China se ha convertido también en el mayor socio comercial de Brasil, Chile y Perú y, considerado como país individual, en el principal destino de las exportaciones agroalimentarias argentinas . La correlación entre el precio de las exportaciones de América del Sur y la demanda industrial china es más del 60%.
El efecto más importante de la irrupción de China/Asia en el comercio internacional es la modificación que ha provocado en los términos de intercambio globales. Por eso, para el resto de los países emergentes, ante todo los de América del Sur, desaparecieron las ventajas comparativas en los productos industriales trabajo-intensivos y reaparecieron, en gran escala, las ventajas comparativas en la producción de commodities. El resultado es que la estrategia de desarrollo que le impone a América del Sur la nueva estructura de la acumulación global surge ahora, por necesidad, de la transformación irreversible de los términos de intercambio . China se convierte este año en la principal inversora directa en Brasil, como ya lo es en Perú (Camisea / U$S 4.300 millones), con inversiones en minería, acero, industria automotriz e infraestructura. La República Popular es la mayor exportadora mundial de capitales (11% del PBI en 2008/ U$S 350.000 millones), con inversiones directas en el exterior que alcanzarían en 2010 a U$S 100.000 millones (U$S 56.500 millones en 2009).
China se apresta a comprar la masa de la nueva oferta accionaria de Petrobras por U$S 32.000 millones, parte de una ampliación de capital de U$S 82.000 millones, con un plan de inversión de U$S 224.000 en 5 años. Lo que está sucediendo es que la República Popular comienza a reciclar su exceso de ahorro hacia otros países emergentes, al igual que lo hizo con los EE. UU. en los últimos 15 años, cuando adquirió títulos del Tesoro por U$S 1.5 trillones.
La contrapartida es que las exportaciones brasileñas a China aumentaron 60.3% en los primeros 6 meses del año, a un ritmo mayor que el de la región asiática. La integración creciente entre China y Brasil es parte del incremento del comercio Sur-Sur, una de las mayores manifestaciones del vuelco de la demanda mundial desde los países avanzados a los emergentes. El comercio Sur-Sur, primordialmente Asia/América del Sur, es 43.1% del total en 2010 .
El problema de Sudamérica no es la estructura de sus exportaciones, sino su débil crecimiento potencial de largo plazo, su baja tasa de inversión y su nula o negativa productividad. América del Sur no está castigada por la “maldición de las materias primas” -apreciación de la moneda e incapacidad de exportar de los otros sectores de la economía-, sino por su incapacidad histórica para incrementar la productividad .
Esto es lo que crea una estructura económica heterogénea y divergente entre el sector de materias primas y el resto. En cambio, cuando la productividad del conjunto es alta, la disposición en gran escala de materias primas es una bendición. Es el caso de Australia, Canadá, los países escandinavos y EE. UU., entre otros. Es lo que advirtió Federico Pinedo en la década del 50, fundado en el capítulo 25 del primer tomo de El Capital (La moderna teoría de la colonización).
Etiquetas:
América Latina,
Brasil,
China,
crecimiento,
exportaciones
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario